Granadas de agosto
La granada es una fruta no climatérica, por lo que no madura una vez recolectada. Así pues, es de vital importancia recolectarla en su punto óptimo de maduración para que sus niveles de azúcar y acidez así como la intensidad de color sean los que caracterizan a cada variedad.
Ambas variedades (Emek y Shani) tienen un gran potencial productivo y comercial por su belleza y sabor, pero el valor añadido reside en su fecha de recolección. Tradicionalmente la granada se recolectaba en octubre y noviembre, pero la mejora genética ha conseguido obtener estas variedades que permiten recolectar una fruta excepcional 2 meses antes, comenzando a mediados de agosto.
Granadas de agosto
La granada es una fruta no climatérica, por lo que no madura una vez recolectada. Así pues, es de vital importancia recolectarla en su punto óptimo de maduración para que sus niveles de azúcar y acidez así como la intensidad de color sean los que caracterizan a cada variedad.
Ambas variedades (Emek y Shani) tienen un gran potencial productivo y comercial por su belleza y sabor, pero el valor añadido reside en su fecha de recolección. Tradicionalmente la granada se recolectaba en octubre y noviembre, pero la mejora genética ha conseguido obtener estas variedades que permiten recolectar una fruta excepcional 2 meses antes, comenzando a mediados de agosto.
Llena de salud
Consumir la fruta de la granada o su zumo es capaz de reducir los niveles de colesterol, debido a la combinación única de polifenoles que parecen disminuir el colesterol LDL o colesterol malo en la sangre, que puede beneficiar al corazón.
La granada cuenta con numerosos beneficios, desde aquellos para el corazón, para la piel, contra la artritis oen la lucha contra el cáncer.